De momento os daré la información del día:
- LLEGADA: Bien, la nuestra; la de los niños más accidentada porque el autobús vino por otro camino y se marearon algunos. Pero todos llegaron con buena cara y encantados.
- NOS INSTALAMOS: Ellos en las tiendas... nosotros en la cocina.... Descargamos toda la comida, organizamos, nos ponemos a fregotear... Los niños instalan sus cosas mientras corretean y juegan. Los maravillosos "mochileros" (cuelga mochilas) hechos para dejar las mochilas fuera de las tiendas...¡se rompen uno a uno! -Cero problema... mochila al suelo...!
- COMIDA: Fenomenal, muy bien cocinada, todos la trajeron de su casa... Todos menos uno (a alguna madre le vamos a leer la cartilla...) pero, tal y como nos dice Mayte nuestros espíritu maternal le socorrió.
- TARDE: Hicieron los grupos, jugaron, y a nosotras ¡nos dio tiempo a dar un paseo...! La verdad es que la zona es muy bonita, muy arbolada y hemos de deciros que ahora mismo estamos con la polar puesta y tan a gusto.
- LAS 7.30: hora de empezar a freír sanjacobos... ¿Alguna vez habéis frito 140 sanjacobos? y ¿habéis preparado 6 ensaladeras hasta arriba...? Pues nosotras hemos descubierto que ¡¡lo hacemos fenomenal!! Todos los niños han cenado estupendamente, incluso los que no querían ensalada. Conseguimos que la cena estuviera para las 8.30 y que todos los niños dijeran que todo estaba rico...
La verdad es que ellos han tenido después velada, juegos, un ratito de oración (un niño, Sergio, dio las gracias por las cocineras...¡qué mono!... mañana le daremos más chocolate), pero nosotra estábamo agotadas, nos hemos dado una ducha (...fría...porque los niños habían agotado el agua calientee... ¡más puntos para el certificado de nacimiento en Bilbao!) y nos hemos retirado a nuestros aposenos. Aunque de vez en cuando viene algún niño a despedirse y a darnos besos (sobre todo mis hijos, claro)
Tranquilas madres que ya estamos pendientes de todos. De echarle a crema a Pablo (el de Maite) que se puso colorado; de dar besos cada vez que pasamos al lado de alguno... de arreglar algún otro pequeño percance... Igual otro día, damos alguna colleja.
Lo peor va a ser lo del estilismo. Primero porque no lo perdemos ni siquiera con el gorro y el delantal. Lo segundo porque aún no nos hemos hecho fotos y no sé si será posible publicarlas.
De momento, estamos limpias y contentas, que no es poco. Los niños también (también limpios y contentos)
Besos a todos. Mañana lo intentamos de nuevo.