¡¡¡VIVA TELEPIZZA...!!!

Queridos padres: por fin estáis disfrutando de vuestros hijos y nosotras de la tranquilidad y las comodidades de nuestro hogar. Así que aprovechando un momentito entre lavadora y lavadora me voy despidiendo. Mis hijos hoy decidieron que querían pizza y a mí me pareció la mejor de las ideas. ¡Qué invento! Nunca antes lo había apreciado tanto: llamas por teléfono y viene un muchacho que te trae la comida ¡¡ya cocinada...!! (alucina) y no te tienes que preocupar de los ingredientes pos si alguien es alérgico... ¡Y te sientas en una mesa con mantel, servilletas y vajilla...!

Por cierto, ¿qué tal la operación lavadora con todos los detergentes de mer cadona juntos? Pues imaginad lo que supone eso por cuatro personas que hemos llegado a mi casa... ¿Conseguiréis volver a su ser las pocas prendas que han vuelto? (la mayoría estarán en el cajón de objetos perdidos)

Hoy os pondré un par de cositas, mañana o pasado acabaré definitivamente; aunque igual me animo y continúo todo el verano (no, tranquis, que no lo haré...)
Aprovecho también que en la civilización el ADSL me permite mucha más velocidad y subir fotos con una rapidez pasmosa. Mañana intentaré abrir un álbum digital para que todos lo podáis visitar y bajaros las fotos que queráis, pero dejadme antes que descanse, ponga veinte lavadoras más y eche un par de siestecitas en condiciones. Aprovecharé también que la consejería de educación tiene a bien darnos un par de meses de vacaciones (ya lo siento por los demás... las oposiciones están abiertas a todos...)

Las fotos que os pongo son, la primera de la eucaristía final que tuvimos, emocionante y familiar donde las haya. Las anécdotas son variadas. El que aparece en el centro es Alfredo (es decir el cura) y la caja de plástico es el altar, encima hay un vaso con el vino y un platito con el pan. Una de las cosas que más repitieron los niños, tanto en las peticiones, como en las ofrendas, como en la acción de gracias, fue ¡¡que el campamento fuera más largo...!! (No lo quiera Dios) Hubo mucha emoción en el ambiente, lágimas, abrazos...en fin, realmente fue una "mesa de comunión".

La segunda foto es la oficial del grupo, en la que ya entiendo que es difícil vernos porque está comprimida, pero seguro que en el álbum se nos ve mejor.

Y la última es de ayer con todas las tartas preparadas y Maribel sujetándome la de las velas mientras yo intentaba soplar sorbiéndome los mocos. Os aseguro que para mí fue un día estupendo; nunca antes me habían dado tantos besos en mi cumpleaños ni había tenido tanta gente a mi alrededor expresándome cariño y agradecimiento. Igual otro día me doy el gustazo de celebrarlo fuera con mi familia y no tener que preparar un guiso de carne para 60 personas.

Me queda por hacer alguna entrada en la que haré expresos los agradecimientos a tantas personas que se han embarcado en esta "aventura" empezando por esos chavales estupendos y guapísimos que eran los monitores-junior (queda pendiente esa lasaña con piscina en casa de Pilar y Guillermo)

Atentos, chicos, que mañana sigo; hoy me tengo merecido el descanso. CHAO